Abrir una franquicia fuera de Colombia

El siguiente paso para la compañía que ha hecho realidad su objetivo de convertirse en franquiciador es analizar la situación.

¿Qué beneficios le está reportando disponer de una red de franquicias en el interior del país? ¿Qué otras ciudades poseen las características necesarias para lograr un nivel de facturación semejante o superior?

Muchas veces, abrir nuevas franquicias en poblaciones de pocos habitantes llega a ser menos rentable que atreverse a dar el salto a una capital de un país vecino.

Lo importante es llevar a cabo un plan de internacionalización de nuestra franquicia, que podría empezar por los países limítrofes o por aquellos que reúnan unas características económicas, jurídicas y culturales que faciliten la apertura de una franquicia con un alto beneficio.

Hay entornos geográficos que facilitan la expansión de una red de franquicias por los países vecinos, mientras que en otros casos, la realidad puede ser mucho más compleja.

Independientemente de los factores exógenos, hay que considerar también los propios elementos relacionados con la naturaleza del producto/servicio que estamos dando a la sociedad.

Hay productos colombianos que pueden tener una notable acogida allí donde son muy conocidos y hay una alta competencia, o allá donde no se conocen tanto, pero existe un nicho de mercado lo suficiente atractivo para conseguir una buena cuota de mercado.

Si el producto está dirigido a personas de nacionalidad colombiana, puede ser interesante abrir franquicias en ciudades extranjeras en las que haya una alta población inmigrante colombiana y que además reúnan las otras características económicas, legislativas y culturales.

Esto puede ser una buena vía para dar a conocer el producto también en otro país, basándonos en unos patrones de consumo que pueden llegar a variar, si bien el riesgo es más alto que allá donde ya existe una sana competencia.